Pie Torcido

Es muy frecuente comprobar que el recién nacido presente uno o los dos pies torcidos, “hacia adentro”. Si en la exploración que haga el Pediatra al día siguiente  del nacimiento, los pies son reductiblas, es decir, si con una maniobra vuelven a su posición normal, tranquilos. Es una actitud en zambo que es normal y debida a estar en la misma postura durante meses dentro del útero.

Si no se reducen deberemos contemplar la posibilidad de que se trate de un verdadero pie zambo. En este caso habrá que consultar con un Traumatólogo infantil para su corrección.