Tras ver en que consiste el RGE, nos ocuparemos aquí, en como podemos tratarlo, y de que manera podemos aliviar al bebé que lo sufre. Obviamente, todas las medidas que tomemos irán encaminadas a impedir o dificultar que la comida suba de nuevo por el esófago hasta la boca, y que el ácido clorhídrico del estómago dañe esta estructura.

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Como en muchas otras ocasiones ocurre, hay medidas a tomar que serán igual o más importantes que los medicamentos. Así pues esto es lo que podemos hacer ante un cuadro clínico de RGE:

La primera medida y una de las más importantes será el tratamiento postural. Va a ser muy importante que mantengamos al bebé erguido, en posición vertical tras la toma, al menos 20 o 30 minutos. De igual modo, allí donde el niño vaya a estar tumbado, cuna, cochecito de paseo etc., deberá estar incorporado. Puedes introducir debajo del colchón o de la colchoneta del carrito una toalla enrollada o algún objeto que lo incorpore.

Si das lactancia artificial, puede beneficiarse de las leches antireflujo, las fórmulas AR, que son leches de inicio como las normales pero que están espesadas con harina de algarrobo o amilopectina. Así, al estar el alimento más espesado es más difícil de que vuelva a subir. Funcionan muy bien en general, si bien es cierto que actualmente tendemos a no utilizarlas en lactantes pequeños, menores de 2 meses por el riesgo de provocar una diarrea osmótica.

Antes se tendía a ofrecer tomas más pequeñas en cuanto a cantidad y más frecuentes, pero se comprobó que sólo servía para que regurgitarán más a menudo. Hoy en día recomendamos que las tomas sean las normales en volumen y frecuencia.

En cuanto a medicación, fundamentalmente utilizaremos 2 tipos de medicamentos, que disminuirán los síntomas del RGE, a saber:

OMEPRAZOL: Para mí el más importante. Como os comento, no curará el RGE, pero contrarrestará el efecto corrosivo del ácido clorhídrico del

estómago cuando sube por el esófago y mejorará los síntomas de la acidez.

DOMPERIDONA(MOTILIUM): Este fármaco es lo que conocemos los médicos por un PROCINÉTICO, es decir una medicación que hace que

el alimento este menos tiempo en el estómago y así tenga menos oportunidad de volver a subir por el tubo digestivo.

Fundamentalmente estas medidas más o menos combinadas llevarán a paliar los efectos del RGE. No hay nada que lo cure como tal. Sólo en casos importantes el tratamiento deberá ser quirúrgico.

Pero, debéis tener paciencia. El tiempo juega a nuestro favor. Por un lado conforme pasen los meses su esfinter esofágico estará cada vez más maduro y más competente. Recuerdas? La compuerta de la parte I. Cada vez cerrará mejor. Además a partir de los 4 meses introduciremos las papillas, nuestro bebé tomará una alimentación más espesa que hará más difícil y de forma natural la regurgitación. Ahora bien, os repito, tened paciencia, si existe un RGE de grado medio o incluso importante, es posible que regurgite hasta el año.

Para terminar, os diré como curiosidad que el bebé regurgitador o con RGE, es en el futuro un vomitador fácil.

Espero que os haya sido útil y que hayáis comprendido lo que es y como se trata un RGE, y os quedéis más tranquilos si vuestro bebé lo padece. Pero, por supuesto, consulta con tu Pediatra, el/ella te ayudará.